Layla, de dieciséis años, sólo quiere ser normal. Pero con un beso que
mata cualquier cosa con un alma, es cualquier cosa menos normal. Mitad
demonio, mitad gárgola, Layla tiene habilidades que nadie más posee.
Criada entre los Guardianes, una raza de gárgolas que tiene como tarea
cazar demonios y mantener a la humanidad a salvo, Layla intenta encajar,
pero eso significa que oculta su propio lado oscuro de los que ama.
Especialmente Zayne, el digno de desmayo, increíblemente hermoso y
completamente fuera de los límites de los Guardianes, de quien ella ha estado enamorada
desde siempre.
Entonces conoce a Roth un demonio tatuado, pecaminosamente caliente que
afirma conocer todos sus secretos. Layla sabe que debe mantenerse al
margen, pero no está segura de que querer eso, sobre todo cuando
todo eso del no-beso no es un problema, teniendo en cuenta que Roth no
tiene alma.
Pero cuando Layla descubre que ella es la razón del violento
levantamiento de demonios, confiar en Roth no sólo podría arruinar sus
posibilidades con Zayne... Podría marcarla como traidora a su familia.
Peor aún, podría convertirse en un boleto de ida al fin del mundo.
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"Porque a todo el mundo le gusta saber que no está solo, que no es el único..."